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Lolita

Argumento

Esta novela profundiza en la mente de Humbert Humbert y su apetito por las nínfulas, en concreto, por la nínfula Lolita. El lector sigue los pensamientos, reflexiones y sentimientos de un hombre de mediana edad y su cuestionable relación con Lolita.

Todo empieza cuando Humbert Humbert se traslada a Estados Unidos como condición sine qua non para poder cobrar una herencia. Pero, cuando llega, se encuentra que el amigo ha perdido su hogar, por lo que una vecina se ofrece a acogerlo.

Así es como Humbert Humbert convive junto a una mujer encantadora y su hija Dolores, de doce años. Como el lector ya conoce, siente debilidad por las muchachas jóvenes, y no tarda en sentir pasión y deseo por Lolita. A medida que avanza la novela, se establece una especie de triángulo amoroso: Charlotte, la madre de Dolores, se enamora de Humbert, y Humbert se enamora de Lolita. 

Las dos relaciones se consuman: Humbert se casa con Charlotte y eyacula al lado de Lolita. Entonces, la acción se precipita cuando Charlotte fallece y Humbert queda a cargo de Lolita, su amante y prisionera. 

Abstracción

La narración de la historia de Humbert Humbert empieza después de un breve prólogo escrito por el doctor en filosofía John Ray Jr., que introduce el contenido de este manuscrito encontrado para crear mayor verosimilitud e intimidad. 

Lolita, luz de mi vida, fuego de mis entrañas. Pecado mío, alma mía.

Con esta declaración de amor pasional empieza el narrador a contar su peculiar recorrido vital que comienza en Francia, su posterior formación en París y Londres, y su primer amor con Annabel. A partir de este primer amor, Humbert siente un deseo irracional hacia las nínfulas: muchachas entre nueve y catorce años que revelan una naturaleza de ninfa. 

 

Esta confesión sugiere que Humbert no solo ha superado el estadio del amor infantil, sino que avanza que en algún momento de la narración intentará saciar el deseo que le despiertan las nínfulas. De hecho, esa será la principal razón por la que contraerá matrimonio con Valérie, su primera esposa, quien posee cierta reminiscencia ninfúlica.

Se traslada entonces a Estados Unidos como condición para poder cobrar una herencia, aunque no desatiende su oficio literario. Allí encuentra el tranquilo hogar de Charlotte Haze, que convive junto a su hija Dolores, de doce años. Humbert decide alquilar la habitación disponible porque ya está obsesionado con Dolores, su Lolita. 

Durante una breve ausencia de Lolita, Humbert decide casarse con Charlotte, una acción un tanto sacrificada, ya que lo único que anhela es estar junto a la niña y, quizá en algún momento propicio, poseerla. Deseo que se ha visto aumentado cuando, antes de irse de campamento, Humbert consigue obtener un exquisito placer sin necesidad de tocarla, por lo que, durante los días de su separación, recrear esa sensación es lo que le mantiene vivo y esperanzado.

Pero la armonía que reina en el matrimonio se acaba cuando Charlotte encuentra unos comprometedores escritos, cuyo contenido la enloquece. De manera precipitada redacta tres epístolas y en su afán de enviarlas al buzón de correos es atropellada mortalmente, dejando a Humbert como responsable de Lolita. 

Parece que el sueño de Humbert se ha cumplido: se encuentra a solas con Lolita, aunque para pasar de la idea húmeda a la acción deberá embarcarse en un largo y tenso viaje por carretera, que durará dos años. Durante ese período de tiempo, Humbert se confiesa amorosamente a Lolita antes de poseerla, acto que se sucederá en numeroso hoteles a lo largo de Estados Unidos. 

La finalidad de visitar distintos lugares y hospedarse en cientos de hoteles es esconder la indecente relación que mantienen y sus consecuencias. Aunque Lolita es secuestrada, Humbert vive al final fuera de sí, encerrado en una pesadilla de placer que sabe que debe terminar pero a la cual es adicto. 

Sin embargo, durante una agonizante ausencia, Lolita consigue ponerse en contacto con alguien para que la ayude y desaparece. Humbert se lamente, aunque con el tiempo reconoce su derrota, incluso inicia un nuevo capítulo de su vida. No será hasta pasados dos años cuando recibe una carta de Lolita pidiendo ayuda económica. El reencuentro es amargo para Humbert, porque se encuentra a una mujercita de diecisiete años casada y embarazada. 

Humbert finalmente regresa sin su amada, después de sus fracasados intentos para recuperarla. La novela concluye revelando nueva información acerca del campamento de Lolita y con un Humbert decidido a vengarse. 

Desnudando el libro

El inicio del libro utiliza el recurso del manuscrito encontrado para dotar al contenido de mayor verosimilitud. La peculiaridad de este prólogo se centra en el filósofo que lo escribe, John Ray Jr., y la manera de expresarse.  

John cuenta que el autor ha fallecido de trombosis coronaria en prisión pocos días entes del comienzo de su proceso. De hecho, también adelanta que la señora de Richard F. Schiller muere al dar a luz a una criatura igualmente muerta.

El escrito del filósofo anticipa ciertos acontecimientos, pero sin revelar información clave, aunque resulta suficiente para que el lector se adentre en la lectura coaccionado a imaginar un escenario determinado. Incluso considera que el presente texto se convertirá en referente del campo psicoanalítico por presentar males en potencia.

Una vez concluso el preámbulo, el lector se adentra en la etapa infantil de Humbert para conocer sus inicios: el amor de juventud Annabel. Es muy significativo que Humbert desarrolle este deseo hacia las nínfulas de manera tan específico después de su trágica relación con Annabel.

Parece como si Humbert quedara paralizado en un momento concreto del estadio del deseo, anhelando recuperar esa sensación mediante experiencias eróticas con otras jóvenes. Sin embargo, él mismo ha analizado la situación e incluso ofrece un discurso alrededor de dichas relaciones y su grado de aceptación en distintas sociales, poniendo ejemplos concretos e históricos de casos de artistas con relaciones inapropiadas, como apoyo justificado.

Confiesa ser consciente de lo que implica, por ello mantiene esos vínculos en el plano de la fantasía. No obstante, todo parece cambiar cuando conoce a Lolita. Si bien al principio sigue conservando una relación ficticia, traspasa al mundo real cuando decide eyacular con la niña al lado.

Poco después de la muerte de la madre, Humbert debería haber desempeñado un papel próximo al de padre, protegiendo y ayudando a la joven Dolores a superar la inesperada noticia. En cambio, si bien se ofrece a protegerla, lo hace desde un plano cautivo, anteponiendo el deseo a cualquier otra necesidad.

De hecho, sus interacciones se reducen a intercambios materiales con intención de mantener a Dolores en silencio, ya que Humbert es consciente del riesgo que supone una descontenta e irracional Dolores. La confusión se produce ante una Dolores que en el campamento ha tenido sus primeras experiencias sexuales y la predisposición hacia Humbert que muestra al principio.

Entonces, la verdadera disyuntiva es elegir como lector una posición extrema de lectura, tal como considerar a Humbert un perpetrador de violencia hacia Dolores, figura del violador, o ver a Dolores como víctima indefensa. Se podría interpretar que Lolita posee voluntad, poder y que forma parte de la acción.

La lectura general sugiere una crítica social en segundo plano, ya que aparecen personajes que responden a una funcionalidad precisa, como el director del Campamento Q; que suscita un conjunto de sentimientos encontrados.

Lo que no puede negarse es el impecable y trabajado estilo narrativo, también como parte de la traducción. El lenguaje es preciso, bello, descriptivo, sentido; impregna al lector con la delicadeza de sus descripciones. 

Ambientación

Vladímir Vladímirovich Nabókov, 1899 – 1977, nació en el seno de una familia aristocrática trilingüe. En 1919 la familia se trasladó a Alemania por temor al bolchevismo, donde estudió en Cambridge.

El 1940 decide trasladarse definitivamente a Estados Unidos, después de un período en Francia, huyendo de la Segunda Guerra Mundial. Allí, consigue trabajar en diferentes universidades y visita distintas localizaciones que aparecerán en Lolita, publicada en 1955 con claras crítica al modelo de sociedad estadounidense.

Poco después regresó a Europa y en 1961 se trasladó a Suiza con su esposa, Véra, donde permanecerá hasta su muerte provocada por una bronquitis. 

También fue un gran traductor de sus propias obras y pensador de la literatura, tal como refleja la obra Curso de literatura europea.

Frase reveladora

Si procuro describir estas cosas es para discernir la parte infernal de la celestial en este mundo extraño, terrible, enloquecedor, que es el amor que inspira una nínfula. Lo bestial y lo hermoso se juntaban en un punto.

Reflexión

Lolita se ha transformado en un clásico que debe ser leído. Aunque el contenido del libro no es una elección fácil, merece la pena detenerse en este pequeño universo y explorarlo.

Lolita

Autor

Vladimir Nabokov

Edición

Anagrama, 2002

Páginas

389

ISBN

9788433960177

Valoración

Lolita