La muerte en Venecia

Argumento

La pérdida de la inspiración artística y su recuperación es el punto de partida de esta novela que tiene como protagonista a Gustav von Aschenbach, un escritor ya consagrado que se desplaza hasta Venecia para reencontrarse con esa parte de él mismo.

Lo que von Aschenbach no esperaba era encontrar también el amor, pero no un amor cualquiera, un amor inapropiado. A medida que transcurren las páginas el lector será testigo de los vaivenes del escritor ya no solo para escribir, sino también para cortejar. 

Abstracción

Gustav von Aschenbach es un escritor consolidado y de renombre que posee una consolidada carrera. Sin embargo, su escritura sufre un alto ante la incapacidad de crear. Por ello, decide desplazarse hasta Venecia, ciudad que en el pasado le ha brindado grandes alegrías, pero también tranquilidad.

Su llegada a Venecia es todo lo que cabe esperar de un autor reconocido, pero pronto empiezan a aparecer personajes que serán la clave de esta compleja lectura. El primero de ellos es el gondolero que lo conduce hasta el hotel donde se hospeda, que muestra las primeras señales de aquello que lo perseguirá incesante hasta el mismo final.

Una vez llegado al hotel, von Aschenbach cae rendido, extasiado, ante la presencia de un joven que tiene una presencia apolínea, marmórea, perfecta. Desde ese instante, von Aschenbach hará lo imposible por encontrarse con la familia polaca, actitud que pronto parece transformarse en una obsesión.

Sin embargo, ese no es el único cambio que se produce. El amor que aflora dentro del pecho de von Aschenbach contrasta con el delicado estado de salud que presenta, que, a medida que transcurren los días, va agravándose.

Los esfuerzos de von Aschenbach por permanecer en Venecia parecen producto de un delirio provocado por el amor, por esa irremediable atracción que siente por Tadeusz. Las fuerzas que lo invaden, casi demoníacas, lo sentencian lentamente sin que al principio sea consciente.

A los días de la llegada del autor a la ciudad, esta empieza a mostrar síntomas de una enfermedad que amenaza a la salud de la población, incluidos los huéspedes de los hoteles de las inmediaciones. Pero la familia polaca decide quedarse, y von Aschenbach, con tal de no alejarse de su amado Apolo, toma la misma decisión.

El nudo y desenlace de esta novela muestra la caída en desgracia del protagonista, unida estrechamente a ese paralelismo que se establece entre la enfermedad que asola Venecia y que va dejándola sin turistas, y el mal que lentamente consume al escritor. Resulta un pulso entre la muerte y la aparente resistencia de von Aschenbach, una lucha interna entre los elementos primarios de la naturaleza.

Desnudando el libro

Definir las líneas temáticas de esta novela resulta complejo, ya que Mann ha creado un ejercicio literario a dos niveles. Por un lado, el lector sigue la historia de amor y decadencia del protagonista, también a nivel artístico; y por otra, se encuentra inmerso en una esfera filosófica que no puede separarse del argumento general.

La recuperación de la inspiración expresada como esperanza es el tema del que parte la novela. El cambio de escenario es más bien una excusa, pero también la razón de la acción principal. Von Aschenbach contempla la huida y el refugio como la única opción de salvar su producción literaria, como aquel cambio que le devolverá la comunión entre él mismo y su faceta artística.

Su llegada accidentada a la ciudad no es casual, es de hecho el primer momento e indicio de todo un movimiento que se pone en marcha. Y es que el mismo título desvela el desenlace de la misma novela: el protagonista es abocado a una inevitable muerte que encontrará en la ciudad que debe protegerlo.

En medio del caos producido por una ciudad en declive, von Aschenbach es capaz de encontrar el amor, de volver a sentir aquello que creía olvidado; y lo hace con el enamoramiento que le causa un joven de aspecto perfecto. La introducción de este personaje y la atracción hacia un joven no es casual, Mann quiere poner en evidencia la homosexualidad, un rasgo presente en su vida y que debe esconder para seguir con la normalidad de la época. Por lo tanto, la crítica y denuncia de un tema tabú es notoria.

No obstante, el amor que von Aschenbach siente es idílico, platónico, ya que el joven no solo está lejos de él en un plano físico como tal, así como la distancia de la edad, sino también en un plano filosófico. Desde el principio, la voz narrativa introduce a Tadeusz como un muchacho cuyas facciones encarnan la perfección griega, cuyas ropas representan la inocencia, la armonía y la belleza masculina como ideal. Este concepto apolíneo contrasta enormemente con el deseo dionisíaco que invade al propio von Aschenbach cuando se enamora. El escritor cae presa de un delirio del deseo, embriagado por el vino de la hermosura.

Las referencias a las concepciones opuestas de la vida, que son definidas por Nietzsche en El nacimiento de la tragedia, son un constante en la novela, y requieren una profundización que se entiende mejor con un conocimiento previo de esta obra filosófica. El proceso de declive al que es sometido el protagonista tiene su centro precisamente en esta dualidad que imponen las esferas, ya que la pasión y el frenesí de von Aschenbach lo nubla todo hasta perderse a sí mismo. El objetivo de su estancia en Venecia deja de ser la redacción de una nueva novela para transformarse en la persecución incansable del sentimiento amoroso.

Sin embargo, las reflexiones filosóficas que acompañan a la contrariedad que se produce entre Apolo y Dionisio, y todo lo que simboliza, no es la única que aparece en la obra. Mann teje una red de reflexiones en torno a la creación de una novela, al momento de la escritura, a la obra de arte y el mundo artístico en general; sin olvidar conceptos más abstractos como la vida y la muerte. La pulsión e instinto por la vida que se despierta en von Aschenbach es antónimo de la enfermedad que paulatinamente se extiende por la ciudad y que conforma una evolución en paralelo con el malestar que empieza a experimentar el escritor.

Al final, lo que Mann presenta en esta breve obra es un ejercicio magistral acerca de las apariencias, que se encarna en el protagonista y ese afán por esconder lo inevitable, y la esencia, que serían los sentimientos que lo impulsan a seguir en Venecia hasta el final; y que están presentes en cada uno de los personajes, acciones, indumentaria… todo forma parte de esta tremenda construcción narrativa.

Ambientación

Paul Thomas Mann, 1875 – 1955, nació en el seno de una familia acomodada en pleno Imperio alemán, fruto de una relación entre un hombre de negocios y una mujer comerciante de origen brasileño.

El poder económico de la familia permitió a Mann estudiar obtener una educación privada en casa, lujo al que siguió su ingreso en un prestigioso instituto de bachillerato.

Sin embargo, los resultados académicos no fueron demasiado satisfactorios y en realidad acabó formándose como autodidacta siguiendo los pasos de su hermano mayor.

Cuando muere el padre, la familia se traslada a Múnich, donde Mann consigue publicar sus primeras novelas en distintas publicaciones. La influencia de los filósofos alemanes, así como sus viajes por Europa, son palpables en su obra.

Concretamente, en La muerte en Venecia, Mann refleja su amor por los hombres, aunque acabó por casarse con una mujer, hija de un intelectual judío. La familia crece con el tiempo, así como su reputación.

Se pronunció con respecto a los debates políticos, si bien sus ideas fluctuaran con el tiempo. Lo que sí permaneció fue su lucha para que se revocara el castigo hacia los homosexuales.

Cuando el régimen nazi cogió fuerza se mostró como firme opositor y fueron esas ideas las que finalmente le condujeron al exilio; consiguió la ciudadanía checoslovaca y viajó con frecuencia a los EE. UU., donde también obtuvo ciudadanía.

Sus hijos lucharon en el frente y las consecuencias fueron inevitables, Mann tuvo que lidiar con la pérdida de tres de sus hijos. Regresar a Alemania no parece una opción segura, así que se instala en Suiza. A mediados de 1955 sufre un problema de salud derivado de una trombosis, que será la causa de su muerte el 12 de agosto.

Reflexión

La muerte en Venecia es de esas obras que permanecen junto al lector tiempo después de haber sido leída.

La miscelánea de temáticas y reflexiones que propone son inmortales; y su brevedad la convierte en una obra perfecta para todo tipo de lector.